SÁÑEZ

RULO 2017

Para mí acoso es toda clase de interacción no solicitada, por lo tanto, inoportuna, por lo mismo, forzada. En ese entendido, el resultado de la misma es responsabilidad del agente, cuya osadía tiene de hecho como posibles resultados beneplácito o enfado. Actuar ansiando únicamente la autosatisfacción indica egoísmo, falta de tacto y de interés en la persona que recibe cualquiera que fuere el trato no consensuado. Como en todo juego de interés, los resultados varían, es una apuesta por la reciprocidad o un acto de violencia ante un rechazo consabido. Como crimen existe y lo es por el simple hecho de la imposición violenta de un hecho no deseado sobre quien lo sufre. Este tipo de interacciones pueden ser desde criminales y netamente malintencionadas hasta inocentes y torpes. El problema radica en que vivimos en una sociedad permisiva ante cualquier clase de impertinencia de quienes se sienten en ventaja y que supone que los afectados son culpables de la inequidad en las reglas; desde el

R.S. 2017

Hoy no pretendo regalar flores de tinta a mis amigas. Las abrazo mas en una misma lucha.           No faltan los gritos en contra:    ¿por qué no hay un día del hombre, de los heterosexuales, de los blancos, de los ricos? Porque no los matan por ser lo que son. Porque no los humillan, no los violan con impunidad. Porque el mundo y las oportunidades, la ley, los ha favorecido sobre el resto del mundo por centenares de años. Porque su día, en fin, es la historia de la humanidad. Porque la mujer, siendo mayoría, sigue en estado de sometimiento y vulnerabilidad por esa parte del mundo que, ante la posibilidad de perder el privilegio, tergiversa las luchas sociales. Un mundo donde todos tengan la misma calidad de salud, de economía, de oportunidades y de expresión los aterra. Un mundo donde las mujeres tengan el merecido lugar significa para ellos un mundo donde ya no tienen la mitad resuelta; un mundo donde las oportunidades y las aptitudes se demuestran y no se s

A Dress

Uno de la oficina con quien jamás crucé palabra me dio una tarjeta de un comercio cercano con una promoción de tenis 2x1. Uso tennis rotos. Estaba al teléfono y no lo increpé bien. -¿Y esta, qué es? -Es aquí cercas... No tuvo huevos de decirlo. Le hubiera contestado: ¿Qué, ¿te ofende?? ¿Puedo comprarme zapatos? Probablemente ya. ¿Los necesito? No. No me lastiman. Me vale verga. Gente tan superficial o magnánima, si aplica. Je. No puedo creer que a alguien a quien no había visto en mi vida le importe tanto mi calzado... casi siento feo no haberlo notado jamás. #POW